Amante de mi jefe

Todo comenzó cuando ingrese a 4 semestre de preparatoria, el primer día de clases en mi plantel surgió una nueva modalidad de estudio denominada formación dual, la cual consiste en desempeñarte profesionalmente en una empresa en tiempo completo como si laboraras para la empresa hasta concluir el bachillerato. Cuando nos presentaron la modalidad, preguntaron quien estaba interesado en ingresar a dicha modalidad yo me ofrecí como candidata junto con 7 compañeros más, nos indicaron a qué lugar y hora teníamos que acudir para entrevista de trabajo, esto debido a que solo necesitaban 2 practicantes, uno para el departamento de contraloría y otro para el departamento de recursos humanos. Ese mismo día saliendo de la escuela yo y algunos de mis compañeros nos dirigimos a la entrevista de trabajo, sinceramente me emocionaba mucho la idea que nos presentaron, al llegar a la empresa nos dirigimos al departamento de recursos humanos, posteriormente la gerente del departamento (ingeniera) nos dio a cada uno una solicitud de empleo para que la requisita ramos y pasáramos a entrevista al concluir de llenarla, fui la penúltima en pasar a la entrevista, ese día salimos todos muy noche.

Tres días después dieron el resultado de los dos postulados que habían sido escogidas, entre los seleccionados me encontraba yo y otra compañera, una semana después nos pidieron que nos presentáramos con nuestra documentación ya para laborar en la empresa. Cuando ingrese al hotel verdaderamente estaba emocionada todo iba muy bien en un principio hasta que mi jefa gerente de recursos humanos” me limitaba muchas cosas como dialogar con compañeros en horas de trabajo, dejar tiradero en mi escritorio etc. (No me culpen estaba acostumbrada a estar en un ambiente menos serio) Aún recuerdo cuando lo vi por primera vez, un hombre alto, blanco, rostro arrugado, cabello canoso, delgado, nada atractivo, nada fuera de lo común, ingreso como gerente del departamento de mantenimiento a apenas tres semanas después de mi ingreso al hotel. A cinco meses de mi ingreso como practicante, me sentía triste, aburrida, harta de siempre lo mismo, de la actitud tan exigente de mi entonces jefa, así que me arme de valor y le pedí cambio de departamento, su respuesta fue un déspota NO seguido de una argumentación bastante ridícula “te tienes que merecer tu cambio, tu actitud no se presta para que te pueda cambiar de departamento blablablabla”.

Una tarde estaba repartiendo estafetas informativas a todos los colaboradores de la empresa, cuando llegue a la oficina del gerente del departamento de mantenimiento a quien en ese entonces conocía solo de vista y uno que otro cruce de palabras quien se mostró muy atento, me abrazo diciéndome con un ligero acento tapatío que él siempre era cariñoso con las mujeres por que le recordaban a su hija, en ese momento no vi mal que me abrazara ni que me hablara tiernamente ya que estaba teniendo un mal día, un día solitario, un día normal, así que me hizo sentir bien que alguien fuera lindo conmigo, entonces me pregunto que si quería estar con él en su departamento y ser su practicante por lo cual acepte diciéndole que si quería pero que mi jefa me había negado los cambios a otros departamentos.

Pasaron algunos días después de aquella pequeña conversación en su oficina, una tarde lo vi salir de la oficina de mi entonces jefa yo iba entrando a la oficina y me dijo que me iba a ir con él a su departamento como su practicante mi reacción fue de felicidad al oír esas palabras ya que estaba harta de mi jefa y me dije a mi misma “no puede ser peor que la ingeniera” espere a que mi jefa me diera la noticia, no me animaba a preguntarle por miedo a que me dijera que no, paso el día, al día siguiente al ver que la ingeniera no me decía nada me arme de valor y le pregunte lo que me había comentado el ingeniero, a lo que me pregunto -“¿te qué quieres ir un mes al departamento de mantenimiento?”, mi respuesta fue un sí definitivo. Cuando fue mi primer día en el departamento de mantenimiento mi nuevo jefe se encontraba preparando su equipaje para salir de viaje por lo que solo pudo darme una muy pequeña introducción de lo que debía de hacer durante los días que estaría ausente seguido de la frase -“Puedes hacer lo que quieras, esta es tu oficina”.

Mi jefe es de Guadalajara y allá tiene a toda su familia, hijos, esposa, padres etc. por lo que cada 2 meses va para allá a verlos. Su trabajo hace que este constantemente de viaje por todos los estados de la república por lo que siempre está lejos de su familia. Su principal prioridad es el trabajo seguido de su familia. Al decirme que podía hacer lo que quisiera, algunos de mis pretendientes de ese entonces me iban a visitar a lo oficina sabiendo que mi jefe se encontraba de viaje. En ese entonces había un chico que también era practicante que me gustaba mucho, él era un chico muy atractivo físicamente, ojos color miel con pestañas risadas, cabello castaño claro, alto, blanco, era el típico chico con el que todas quieren. Un día dialogando por Facebook con el chico que me gustaba le confesé que me gustaba, para mi sorpresa me correspondió diciéndome que yo a él también.

Nunca habíamos platicado en persona, a pesar de que siempre nos veíamos en las instalaciones del hotel, así que quedamos en platicar en persona ese día llego muy temprano al hotel a comparación de la hora a la que acostumbraba llegar, entonces empezamos a conversar hasta que pasaron algunas horas, de pronto llego mi jefe a la oficina y corrió al chico que me gustaba, posteriormente también me regaño diciéndome que no quería volver a ver a alguien conmigo en la oficina, mi reacción fue de incomodidad combinada con un poco de tristeza ya que ese chico de verdad me gustaba, así como llego mi jefe a la oficina salió. El chico que me gustaba al llegar a su casa me envió unos ambos diciéndome cosas lindas como que la había pasado bien conmigo etc. Yo le pedí disculpas por el comportamiento de mi jefe para lo que él me respondió que no importaba.

Esa fue la última vez que platique con él. Al día siguiente no me presente al hotel, al revisar el muro del chico que me gustaba, vi un estado publicado por él que decía -“Ella solo ella”, mi reacción fue de enojo ya que era muy obvio que la chica a la que le dedicaba el estado no era yo, me moleste mucho porque me di cuenta que yo no era la única chica que pretendía, así que no le volví a hablar y él no me busco más. Me sentía muy triste ya que de verdad estaba ilusionada con ese chico, lo se es ridículo ilusionarme con alguien con quien solo había conversado solo una vez, mi jefe al verme triste me pregunto que tenía, le conté lo del chico que me gustaba, el chico que corrió y el me empezó a decir que ese chico solo me quería para un rato y que él lo vio besándose con otra, que él no me convenía y que no lo buscara en más. En mis pensamientos me decía a mí misma “Como puede decir eso de él, si ni siquiera lo conoce” Total pasaron los días y mi jefe comenzó a hacerme preguntas que me parecieron extrañas porque solo llevaba algunos días de conocerlo.

Preguntas como: –“¿Eres virgen?”. –“¿Cuántos años tienes?”. –“¿Quieres que te enseñe a hacer el amor?” Para lo cual respondí con la verdad: -“Si soy virgen y quiero llegar virgen al altar”. –“Tengo 17”. –“No me llama la atención el sexo”. Dialogando con 2 compañeras me contaron que mi jefe se les había insinuado solo que en mucha menor escala con comentarios como –“me gustas”. Con forme transcurrían los días se acercaba más a mí, me tomaba la mano, me abrazaba, me decía que yo le gustaba, que era una niña muy bonita, todo eso me incomodaba demasiado así que le pedí que dejara de hacerlo, el me argumentaba que lo hacía sin malicia, que jamás se metería con una niña como yo. Paso el tiempo y no hizo caso a mi petición me seguía tocando, diciéndome que me quería enseñar a hacer el amor, solo que esta vez me pedía que le mostrara mis pechos y que me dejara tocar por él, eran tan obvias sus insinuaciones. Así que desesperada de la situación le conté a una compañera estudiante de psicología pensando que podría aconsejarme sobre qué hacer, ella me dijo que lo que mi jefe hacia conmigo era manipulación y que para evitar futuros problemas pidiera cambio de departamento. Sinceramente ignore el consejo de mi compañera porque fuera de las insinuaciones sexuales de mi jefe hacia mí me sentía a gusto estando como su practicante, era muy simpático y gracioso, siempre me hacía sentir bien, son las únicas dos virtudes positivas que vi de él y si pedía cambio de departamento me estaría arriesgando a que mi nuevo jefe  fuera igual o peor que la primero. Paso el mes y al final termine quedándome como su practicante durante el tiempo que duraría mi convenio con la empresa debido a que mi primera jefa dejo de laborar en la empresa y mi jefe pidió cambio permanente para mí.

Soy una chica muy seria, tímida, solitaria, vengo de una familia disfuncional en donde crecí viendo pelear desde mi niñez a mis padres hasta el día de la muerte de mi padre quien falleció cuando yo tenía 15 años así que nunca tuve una figura paterna. Mi jefe era consiente de mi situación así que me cuidaba, estaba al pendiente de cómo me sentía y cosas así, siempre discuto con mi mama porque es una persona de mente muy cerrada y terca a quien no le tengo confianza, mi jefe siempre me escuchaba algo que de verdad me hacía falta así que me dejaron de importar sus insinuaciones sexuales y deje de mirarlo con asco. A principios de mes 2 de sus hijos llegaron desde Guadalajara para quedarse unos días con su papa o sea mi jefe, por lo que los llevaba a la oficina y se la pasaban conmigo a veces, platicamos un poco e intercambiamos Facebooks.

Transcurrió el tiempo hasta que un día le pedí permiso para salir temprano porque quería salir con un amigo por lo que sugirió que echáramos un volado en donde si salía cara yo lo besaría en la boca y si salía águila me iría sin que me diera prorroga, salió cara por lo que ignore nuestro acuerdo, al día siguiente me recordó sobre nuestro volado lo mire con asco y le dije que el beso se lo daría en la mejilla el volvió a sugerir que apostáramos esta vez doble o nada si caía cara ya no serían 2 besos los que le daría sino 4 y si caía águila todo quedaría olvidado así que acepté, nuevamente volví a perder así que le bese las mejillas, el insistió en que el beso debía ser en la boca, yo lo mire con asco y le dije que no lo haría, me dijo que estaba bien. En el transcurso de la semana empecé a sentir una sensación extraña cuando estaba con él y me preguntaba a mí misma “¿me estará empezando a atraer mi jefe 21 años mayor que yo?” ignore mis pensamientos y continúe todo normal, un día yo y el estábamos haciendo recorrido por las instalaciones del hotel, después de estar un rato caminando nos sentamos en uno de los salones, el cual no tenía iluminación para lo que me recordó los besos que le debía en el volado, le di los besos en la mejilla, el me pregunto cómo le robaría un beso a un hombre, yo hice el ejemplo con un beso que le di en la mejilla, el me pidió que le robara un beso, insistió tanto que me anime y lo bese en la boca, nos besamos, durante el beso sentía una sensación de placer y miedo, el me abrazo me empezó a tocar me deje llevar y acabamos dándonos un buen faje, no podía creerlo me estaba fajando con el hombre que alguna vez me dio asco, entonces estaba segura, de verdad me atraía mi jefe.

Cuando regresamos a la oficina y el me intento mirar a los ojos yo solo le desviaba la mirada, no lo quería mirar por lo mal que me sentía, el me pregunto que si estaba bien, yo le dije que era un hombre casado con hijos de mi edad y que estaba mal lo que acabábamos de hacer. El me respondió que solo estaba con su esposa para evitar que sus hijos crecieran con padres divorciados, que en cuanto sus 3 hijos fueran mayores de edad se divorciaría de su esposa, según sus palabras entre su esposa y él no había nada como pareja. Yo le creí y seguí con los besos y caricias sin llegar a más. -¿Qué tan poco se quiere una mujer para ser plato de segunda mesa de un hombre que solo quiere satisfacer sus necesidades? -Qué falta de moral de las mujeres que son amantes de un hombre, ¿que no se dan cuenta que están destruyendo una familia? Eran algunas de las frases que me venían a la cabeza cuando alguien mencionaba la palabra “amante”, nunca me imaginé que yo me convertiría en una. Transcurrió el tiempo solo habían besos y caricias, no me importo que estuviera casado ni mucho menos que tuviera hijos, aunque me si me seguía incomodando su situación, lo único que me importaba era que ya no me sentía sola, que me sentía bien cuando estaba junto a él.

Después me insistía con preguntas y frases como: -“¿Cuándo saldremos para hacer el amor?”. –“Quiero hacerte el amor”. –“Tengo muchas ganas de hacerte el amor”. –“Llevo años sin tener sexo”. Etc. me empecé a sentir presionada por su insistencia en tener relaciones sexuales, yo aún era virgen y no quería perderla con él porque sabía que no era el indicado, así que le dije que si solo me quería para sexo que se fuera olvidando de mi porque yo quería llegar virgen al matrimonio, a lo que él me contesto: -“No te quiero solo para sexo, pero soy hombre, tengo necesidades y me hartare de solo caricias y besos”. Acepté tener sexo por sus continuas presiones, no quería perder mi virginidad pero tampoco quería que él se fuera de mi lado, por lo que él me dijo que esperaríamos hasta que cumpliera 18 años para no tener problemas.

Tiempo después de perder mi tan valiosa virginidad, una noche en mi casa revisando mi Facebook vi una imagen de su esposa en donde los dos se besaban me puse muy triste y comencé a llorar al ver que me había mentido con respecto a su esposa, pensé: “Le di algo que para mí significaba mucho a un hombre que solo me uso para satisfacer sus necesidades”, me sentí fatal aunque en el fondo sabía que era culpable por no haber escuchado a mi lado lógico que me decía que el solo me quería para sexo. Al día siguiente llegue muy enojada a la oficina y no le hable durante dos días, él al verme en ese estado lo único que me decía era: -“No te voy a estar rogando, así que si no me quieres hablar no es mi problema”. Una tarde estando solos me pregunto algo relacionado con el trabajo, no conteste al poco rato no pude contener mis lágrimas de tristeza y enojo, caí en llanto. Él pregunto –“Que tienes”. Le conté que había visto una fotografía en la que estaba besándose con su esposa, me explico que la foto era vieja, al ver bien la foto note que lo que él decía era verdad ya que en la fotografía se le veían menos canas y arrugas.

A finales del año un compañero me conto que mi jefe se había acostado con otra chica de 17 años y medio, le pregunte como era que el sabia eso, el me contesto que siendo amigo de la chica, ella misma le conto y le enseño sus mensajes, mi reacción evidentemente fue de enojo, creí las acusaciones de mi compañero como ciertas ya que en varias ocasiones había visto a la chica y a mi jefe muy cariñosos, al asomarme repetidas veces a ver el celular de mi jefe llegue a ver que se mensajeaban constantemente y a veces la chica se quedaba tarde en su oficina argumentando que haría tarea, por lo que le reclame sobre la situación, Me argumento lo siguiente: -“Ella es una niña, ¿Cómo crees que me metería con ella?”. –“No me gusta, es una chica fea a la que solo quiero como amiga, solo nos llevamos bien, solo somos amigos”. A lo que yo respondía: -“Cuando me conociste yo también era una niña y no te importo, aun así me manipulaste para que me fijase en ti, ¿qué importa el físico en el sexo, total por donde lo haces no es la cara o sí?”. Etc.

Total no importa que pasara, siempre nos reconciliábamos. Empecé a notar cosas extraña de él. Como:
• Siempre borraba sus conversaciones de Whatsapp con otras chicas.
• Les hablaba muy cariñoso a otras mujeres
• Al asomarme a ver sus mensajes cuando el mensaje aba, al darse cuenta prefería salirse para mensajera a gusto.
• En varias ocasiones al espiarlo mientras llamaba pude escuchar intercambios de “te amo” entre él y otra mujer.
• Me dijo que a su esposa ya no le decía que la amaba, que ni siquiera hablaban por teléfono, me dijo que él no tenía Facebook. Lo anterior descubrí que fue mentira, hablaban constantemente por teléfono e intercambiaban mensajes de amor, no parecía una relación de matrimonio rota como la que él me dijo que tenía, no parecía tal cosa porque fue mentira lo que me dijo de que su matrimonio estuviera mal y que acabaría en divorcio, al revisar su Facebook pude observar a una esposa muy amorosa, siempre lo etiquetaba en imágenes de amor, le daba los buenos días etc.
• Cuando hablaba por teléfono o le marcaba su esposa, siempre salía de la oficina para contestar las llamadas.

Conforme pasaba el tiempo descubría más y más mentiras sobre él y su matrimonio, al enfrentarlo siempre se justificaba, así que me canse de reclamarle y me quede en silencio observando cómo mentía, aun cuando tenía evidencia que comprobaba que mis acusaciones eran ciertas, él siempre tenía el cinismo de negar todo, lo he intentado dejar tantas veces que he perdido la cuenta, en un principio él usaba chantaje sentimental para que no me fuera, al compartir la oficina todos los días me resultaba imposible no acceder, siguió transcurriendo el tiempo me llene de ira hacia él, él era consciente de lo importante que era mi virginidad para mí, no le importó y aun así me utilizo, a veces lo trataba mal para poder desquitar un poco mi enojo por lo que me hizo, constantemente peleábamos tanto que hasta se volvía rutina.

No sé si será amor lo que siento, pero sin duda me ha costado llanto y sufrimiento, muchas veces no pude contener mi llanto y llegue a llorar hasta en frente de él, me siento tan estúpida porque en el fondo desde que empezó todo esto sabía que no era lo correcto y que acabaría muy mal, pero ignore mi lógica y obedecí a mis sentimientos. He dado demasiado por él, tanto que me cuesta demasiado irme así como si nada de su vida, hace 3 meses termino mi contrato con la empresa por lo que solo lo veo cada mes, soy completamente consiente de lo que significó para él y de lo que él ha dado por mí, eso me hace odiarlo más.

A pesar de todo él es la única persona a la que tengo para no sentirme sola. En un año de relación nunca ha hecho ni un solo sacrificio por mí, si desapareciera de su vida ni siquiera se tomaría la molestia en buscarme o saber de mí, nunca ha estado en fechas importantes para mí como nuestro aniversario, mi graduación de preparatoria, mi cumpleaños, se justifica siempre con el trabajo. He pensado en contarle todo a su esposa o arruinar su trabajo que es lo que más significa para él con la intención de que no vuelva a engañar a otras chicas porque conociéndolo sé que lo volvería a hacer, pero no soy vengativa, no me gusta lastimar a los demás sin importar cuánto daño me hagan. Y así me involucre con un hombre casado, en la actualidad tengo 19 años y el 40.