El arquero, mi debilidad

Yo tengo una relación de ya casi tres años, un 7 de junio de 2013 hice lo que pensaba que no llegaría hacer nunca, en fin, mi historia es la siguiente.

Tres meses antes de esta fecha, un arquero de un equipo de fútbol trujillano empezó a hablar conmigo, él no me conocía pero yo sí a él, y sabía muy bien que es casado y padre de dos hijos, él se casó muy joven y asumió responsabilidades muy joven también, nunca disfrutó a cabalidad ni su dinero, ni su libertad y mucho menos su juventud por haber asumido estas responsabilidades tan joven, y es por eso que hacía las cosas a escondidas.

Yo lo conocía desde muy niña, y siempre me gustó, es en realidad muy guapo y cuando me mandaba invitaciones de amistad al comienzo lo rechacé tres veces (me ponía nerviosa que me viera o hablara por eso lo rechazaba), cuando vi una cuarta invitación decidí aceptarlo y efectivamente me habló, empezamos a hablar y todos los días después de sus entrenamientos, al irnos a dormir siempre nos comunicábamos y eso a mí me encantaba, al tercer mes era inevitable que yo me sienta atraída por él y él por mí también, bueno, en realidad y siempre lo supe, a él le atraía mi cuerpo. Siempre fui consciente de eso; y mi manera de hablar a él siempre le gustaba, decía que era muy madura para mi edad.

Al mes y medio empezamos a hablar de sexo, él me contaba sus aventuras y yo lo escuchaba y contábamos experiencias, yo le contaba las mías y así empezamos a juguetear… fotos, conversaciones subidas de tono y efectivamente él quería verme, yo me negué a eso, evidentemente sabía que no solo serían besos y abrazos, el pretexto que usaba era mi enamorado, aun por dentro moría por ir con él, dije no y todo por mi enamorado y en ese aspecto me sentía fatal con él, sentía que no se lo merecía.

Un día mi enamorado llega a visitarme y olvida su chat abierto, una chica le habló y me sorprendió todo lo que le decía, seguí leyendo y empecé a buscar conversaciones con sus amigos y para mi sorpresa era él quien me había estado engañando todo este tiempo y no con una sino con cuanta mujer él habría querido, leer sus grandes hazañas me decepcionó, y aunque nunca le dije nada, yo me aparté del mundo cerca de un mes, a él solo le decía que me sentía mal y no sabía por qué, que me diera mi espacio, igual nos veíamos y venía a verme pero yo siempre triste y él ni sospechaba que yo sabía toda la verdad, al mes recordé las palabras del arquero TODOS LOS HOMBRES SOMOS INFIELES y aunque muchas veces le discutí eso me di cuenta de que era verdad.

Decidida con eso, en un conversación con mi arquero él me propuso otra vez vernos y esta vez dije que sí, se alegró y me dijo, déjame planearlo bonito princesa, tú sólo planea tu excusa. Cuando llegó el día estaba tan nerviosa que no comí nada en todo el día, en fin nos encontramos y fue muy lindo, me sentía tan mujer que me encantó cada toque, cada caricia, cada beso erizaba mi piel a tal punto que quería más y más, al retirarnos me despidió con un tierno beso, y me dijo te llamo.

Después de ese día cierro los ojos y lo veo tocándome y acariciándome, definitivamente me dio una de mis mejores noches, pero en fin, la vida sigue y no lo busco porque tampoco lo quiero hacer, yo aun sigo con mi enamorado y definitivamente él va a seguir con su esposa, y espero que ojalá siga así, que quede claro no lo quiero para mí, yo sé bien lo que busca y lo que busco yo de él, pero desde ese día no lo he vuelto a ver y aunque aun me dice para vernos, tengo miedo que algún día se sepa esto, y no por mi enamorado porque él no tendría la cara para reclamarme algo, el temor que siento es que la que lo descubra sea su mujer.