No siempre nos enamoramos de quien nos conviene

El amor llega y no podemos evitarlo.

Me llamo Araceli y tengo 14 años. Lo que viví fue confuso y doloroso, más por la edad que tenía, me enamoré de un chico del colegio. Era mayor que yo, tenía 17 y yo 13, me parecía tierno, lindo y simpático, en serio me gustaba, me la pasaba los recreos enteros mirándolo, hasta que se me dio por agregarlo al Face. No sabía qué pensar, tenía miedo de que no me acepte, pero sentí un gran alivio cuando vi que me había aceptado enseguida.

Al instante me llegó un mensaje de él, mi sonrisa era impresionante, nunca me había sentido así y que él lo llegó a lograr sólo con hablarme era hermoso. Comenzamos a hablar, era tierno y nada tímido por así decirlo, quedamos en saludarnos al otro día en el colegio, y así paso. Me empezaron a llegar comentarios de que tenía novia, así que eso se lo comente a él y me lo admitió, me destrozó por dentro pero no podía hacer nada. Meses no nos hablamos.

Yo comencé a estar con un chico llamado Marcos, era muy lindo, ya estaba olvidando a Lucas (asi se llamaba el chico) hasta que me habló otra vez. Reprochándome que me extrañaba y que no me podía ver con ese chico. Caí a sus pies por segunda vez, seguimos hablando prometiéndonos abrazos, besos, etc. Él estaba en su ultimo año así que tenía que aprovechar, luego de unos meses les empezó a hablar a mis amigas coqueteando. Y yo claramente me ponía muy celosa, para todo esto seguía teniendo novia, yo le conté eso y me decía que era mentira, eso me dolía mas.

Dejamos de hablar hasta el último mes de clase… me empezó a pedir que esté en el recreo con él y yo como tonta enamorada lo hacía, les decía a todos que era su novia, cosa que me encantaba aunque no lo era. Un día mientras yo estaba en el salón de clases guardando mis cosas ya que todos se habían ido, él entró al salón y se sentó al frente de mí y comenzó a mirarme cómo guardaba mis cosas, lo miré y me agarró la mano y después de la cintura y fue un beso tan hermoso que no puedo borrar la sonrisa de mi cara.

Estaba enamorada en serio, no había sido nuestro primer beso ya que él me había robado un pico anteriormente. Cuando terminaron las clases nos dejamos de hablar, olvidando todo lo que había pasado entre nosotros, olvidando cada promesa que me hizo, cada abrazo, cada “te amo”. Comenzó a subir fotos con su novia, destrozando mi corazón la verdad.

Le intenté hablar pero me bloqueó. Unos días después me habló al whatsapp y una sonrisa enorme se asomó en mi cara (el mensaje me lo mandó el 8 de mayo de 2014) preguntándome si iba al cole, a ver si me podía ver, le dije que no iba que por el momento estaba en reposo absoluto por problemas médicos y él contesto muy preocupado, se notaba en cómo escribía y eso me gustaba… Me contó que él no me bloqueo, que había sido su novia… Lo perdoné otra vez, es un amor que no me voy a olvidar nunca, que aunque no hayamos llegado a ser nada, cuando se fue dejó un gran vacío en mí.

Pienso que el amor es ciego y que nadie decide de quién enamorarse y aunque es difícil si no te la juegas por amor no ganas, es lo que hice, perdí. Pero en el momento que sentía que lo ganaba fue lo mejor que pude sentir.

Join the Conversation

2 Comments

Leave a comment
Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *