Su nombre era Jennifer, una hermosa morena de pelo lizo, ojos risueños piernas largas y bellas, una niña en cuerpo de adulto, una mujer apasionada, ella era la mujer de mi mejor amigo, yo, mi mejor amigo y ella nos conocimos en la básica, no me agradaba, me seguía para todos lados, para mí era una pesadilla, era la novia de mi amigo con el cual éramos casi como hermanos.
Un día mi amigo me dijo que ella no lo tomaba en cuenta, era indiferente, decidí hablar con ella por messenger en aquellos tiempos preguntándole por qué su indiferencia con mi mejor amigo, ella respondió directamente que me deseaba a mí y no a mi amigo, en ese momento él estaba a mi lado leyendo la conversación, me sentí fatal, sentí fallarle y en ese momento él terminó con ella.
Pasó aproximadamente un año y ella me empezaba a caer bien, ya la consideraba mi mejor amiga y ademas teníamos una confianza increíble, ella me confesó ser una joven virgen y yo también se lo confesé, como sexo casual nos juntamos para perder nuestras virginidades como símbolo de amistad e iba a ser nuestro secreto, el problema no fue ese, creo que el problema fue enamorarme de mi mejor amiga, de la ex de mi mejor amigo.
Un día le pregunté a mi mejor amigo si le molestaría que tuviera algo con su ex, él respondió muy seguro diciendo que debo hacer lo que tenga que hacer y que él iba a estar bien.
En ese momento dejé de poner obstáculos a mi corazón y me abrí libremente para confesarme hacia Jennifer, ella era 5 cm mas alta que yo y pesaba cinco kilos mas que yo, había una diferencia un poco notoria, eramos una pareja dispareja que nos costó adaptarnos a nosotros mismos, ella se enamoró perdidamente de mí y yo de ella, mi pasión era viajar, juntos recorrimos, Tacna, Perú, Pucón, Chile, Iquique, Chile, Puerto Varas y muchos lugares más, vivimos momentos hermosos, nuestro amor era muy fuerte e intenso hasta que las diferencias hicieron distanciar aquel amor, ella quería ser independiente y que no la controlen, yo era algo mañoso y explosivo, lo peor de todo es que me daba cuenta y eso me hacía sentir aun más molesto conmigo mismo, pero aun así estaba decidido a dar mi vida entera por ella para hacerla feliz, darle una casa, varios hijos y amor incondicional sobre todas las cosas.
Fue una relación de tres años y ocho meses, muy bellos, con altos y bajos, lamentablemente ella se aburrió de mí porque quería libertad y que le aburrían las relaciones serias, a lo mejor la historia me hace sonar a mí como un ogro pero créanme, no lo fui, ella dice que fui un buen novio, pero todo acabó casi de un día a otro, ella ya no estaba enamorada de mí. Caí al abismo casi al borde de la locura, no dormí durante varias noches y lloré hasta más no poder, aun la amo hasta más no poder y es mi amor imposible y lo que más miedo me da es que me conozco bien y sé que nunca jamás la olvidaré, lo sé y lo podría jurar con mi vida
Jennifer C. Soto si alguna vez lo lees quiero que sepas todo lo que te amo y que recuerdes nuestra historia de amor, aunque ya no me quieras seguir amando yo me comprometo a amarte por el resto de mis días
awww que hermoso!